jueves, 9 de febrero de 2012

De casta le viene al galgo...

Ayer saltó la noticia que el Deutsche Bank ha lanzado un producto financiero en el que, el objeto del rendimiento del dinero, es jugar con la esperanza de vida de unos 800 ancianos americanos de entre 70 a 90 años de edad.

No sé exactamente como se calculan los intereses, pero en resumidas cuentas el asunto es que si los señores no se mueren en un tiempo determinado, los inversores reciben dividendos y si se mueren, entonces gana la banca.

Ya no me paro a pensar la dudosa ética del producto en cuestión, sino que es sin duda de un gusto pésimo, cuando además viene de donde viene, Deutschland, un pueblo que se debería pensar dos veces tocar el tema de apostar por la vida o la muerte de nadie.

Me encantaría conocer al responsable financiero autor del engendro...no sé porqué, pero me da que debe llamarse algo así como Himmler, Hess, Goëring o Goebbels.

¡Así está el mundo ...!


1 comentario:

bonobox dijo...

El mercado económico funciona así, la riqueza de unos es la pobreza de otros, la alegría para unos es la desgracia para otros. El dinero y el sexo es lo que mueve el mundo...