Se habrá quedado, como perro que le quitan pulgas. ¡Qué descanso! Después de más de ocho años aguantando intrigas, clanes y putadas. Pederastas, espías, ladrones, traidores saltándole a la yugular desde las más insospechadas estancias.
Y eso que era el representante de Dios en la Tierra, o quizás por eso mismo.
Hoy se retira Benedicto XVI y le deja el marrón al que elijan dentro de unos días.
Al principio no me caia bien, ahora lo compadezco y hasta siento simpatía y admiración por su decisión.
1 comentario:
Dicen que dijo: "Mi paz os dejo, mi paz os doy, que os den por cul*, que yo me voy". Seguro que no es verdad, pero no habría extrañado.
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